Una preciosa historia de amor ambientada en el Madrid actual. Una novela rebosante de ilusión, sueños, sensualidad y pasión por los libros.
A sus treinta y dos años, una nueva vida se presenta ante los ojos de Tina. No solo estrena piso e independencia, sino también un empleo en El desván de los sueños, una librería de barrio y el lugar perfecto para ella.
Pero en ocasiones, al pequeño y solitario comedor de su nuevo hogar llegan las voces de sus vecinos, sobre todo la de Diego, un joven ejecutivo a quien el destino ha puesto a cargo de un sobrino difícil obligándole a abandonar su vida anterior, pródiga en viajes y tratos millonarios. Un día, Diego conoce a Tina y enseguida comprende lo mucho que hacía que no tenía tan cerca a una mujer capaz de ilusionarlo de verdad.
También Tina siente una poderosa atracción hacia él, pero en su alma siguen abiertas aún las cicatrices de un ex marido manipulador y no está segura de querer lanzarse a algo tan frágil como el amor. ¿Acaso no es mejor protegerse, marcar distancia, convencerse de que las únicas historias románticas que acaban bien son las de las novelas que vende en El desván de los sueños?
Mi opinión:
Elena Montagud vuelve con su novela más tierna, una historia de amor, superación, amistad y segundas oportunidades que me duró muy poco y me dejó muy buen sabor en la boca.
Abarca muchos temas entre los cuales la violencia de género. Creo que la autora lo ha tratado de una manera muy correcta y me gustó ver que dio énfasis en que la violencia psicológica también es un delito.
La novela está escrita en primera persona y en pasado desde el punto de vista de ambos protagonistas y también hay partes escritas en tercera personas, esas últimas contándonos episodios del pasado de los personajes.
Su punto más fuerte creo que es la ambientación y los escenarios en los que se desarrolla la historia. Calles, cafés, parques y bares de Madrid, el desván de los sueños, una librería pequeña y acogedora, un lugar casi mágico en el que podría pasar horas, un bloque de pisos con vecinos de lo más interesantes y el hogar de Tina, un piso lleno de libros tal como a ella le gusta.
Tina es una protagonista que saca mucha ternura, simpática, tranquila y a la vez con una fuerza interior que perdió tras pasar varios años consumiéndose y desvaneciéndose formando parte de un matrimonio tóxico. Sin embargo, pero poquito a poco va recuperando su antiguo "yo".
" Sí, era una mujer de más de 30 años, pero me había pasado algunos encerrada en una burbuja. Tiempo atrás la idea de tomar una decisión se me hacía un mundo porque me convencí de que no tenía voz ni voto."
Tina vuelve a abrir sus alas, a ser libre y a volar hacia otra vida para volver a encontrarse a sí misma. No es un viaje fácil y a ratos tomó malas decisiones, pero, parafraseando un fragmento del libro, todos somos santos juzgando pecados ajenos.
" Después de tantos años creyéndome imperfecta e incapaz, volvía a reconocer que ser imperfectos es ser nosotros mismos y que, realmente, si me lo proponía, podía lograr lo que quisiera. Y si no, ¡no importaba! Lo volvería a intentar."
Por otro lado tenemos a Diego, el vecino de Tina, un hombre atractivo y encantador, seguro de sí mismo y exitoso que de un día para el otro se vio obligado a abandonar su estilo de vida y hacerse cargo de su sobrino, Hugo.
" … creo que he tenido miedo toda mi vida. Creo que he tenido miedo de perder a la gente que quiero y, sobre todo, de descubrir que quizá no exista nadie con miedo de perderme a mí."
Su mirada y la de Tina se cruzan por primera vez en el ascensor de la finca en la que viven y saltan chispas. Entre ellos hay una química increíble. Se complementan y son perfectos el uno para el otro. Ella le ayuda durante una época muy difícil de su vida transmitiendole paz y tranquilidad y él le respeta y le apoya, algo que ella necesita puesto que ha vivido en un infierno con un hombre manipulador y egoísta durante muchos años.
" Me hacía sentir deseada y, al mismo tiempo, me parecía estar recuperando un poder que había perdido. El poder de empezar a amar y devolver a aceptar mi cuerpo. El poder de gustarme en todas mis acepciones."
Ella, la chica de los libros y los pasteles, él el friki de los manga y las bandas sonoras, nos regalan una historia de amor y amistad inolvidable.
De los personajes secundarios me gustaría destacar a Rosario. La sentí muy cerca y me encantó su manera de ver la vida y de aconsejar , siempre de manera muy sutil, a los dos protagonistas. Sé que la autora le ha dado otra cara, pero para mí ella es la actriz Kiti Mánver y hasta podía escuchar su voz mientras leía.
" Y también que en el amor no hay que sufrir. Sufrir depende de otras cosas, pero no del amor. Depende de la obsesión,un apego que no es sano, que a veces aparece porque no es una persona correcta. Duele por orgullo o por indiferencia."
Por último, me encantó volver a saber de Blanca y Adrián, protagonistas de la trilogía corazón.
